En la historia reciente, ir a jugar al José Fierro, en Tucumán, era una pesadilla para Boca Juniors. Cosechaba 5 sin ganar allí, y además dicha sequía provocó que el Decano se ubique arriba en el historial con un encuentro de ventaja (16 jugados, 6 ganados por el Xeneize, 3 empates y 7 triunfos de los tucumanos). Pero, al igual que lo ocurrido 2 fechas atrás ante Rosario Central (el equipo con el que peor racha negativa registraba de visitante) sirvió como motivación, y el equipo de Sebastián Battaglia se trajo a Brandsen 805 un triunfo necesitado y vital.

En una liga que se disputa mirando dos tablas para Boca, la de posiciones que lidera Talleres (Lanus puede alcanzarlo) y la anual que es la que clasifica a los equipos a las Copas Internacionales. En ambas, necesita sumar para seguir estando prendido en el campeonato y para estar a tiro de la zona de Libertadores (al arrancar la fecha estaba a 5). Con este contexto que exige, la Copa Argentina, donde viene de eliminar a River en La Plata, se convirtió en la llave ideal para abrir la puerta del torneo más prestigioso a nivel clubes de América, ya que el campeón accede de manera directa. Patronato es el rival de cuartos de final en dicha competición, a quien enfrentará el próximo miércoles, y por ende, el entrenador prefirió armar un mix, resguardando nombres que cargaban demasiados minutos en sus espaldas y dandole rodaje a los que no venían siendo de la partida.

Rossi; Advíncula, López, Izquierdoz, Fabra; Montes, Campuzano, Ramírez, Cardona; Pavón y Orsini. 4-3-2-1 que dio buenas variantes tácticas y fluidez que le permitió ser más que su rival, especialmente en la etapa inicial.

Acertó Sebastián Battaglia en la selección de Rodrigo Montes (categoría 2000, 3er partido en primera) como titular. El juvenil ubicado como interior derecho compensó la producción en ambas bandas. Tanto él como Juan Ramírez funcionan como el eslabón clave para las asociaciones con Edwin Cardona de enlace, Kichan Pavón y el respectivo lateral lanzado al ataque. El Xeneize tuvo variantes equitativas para atacar por cualquiera de los costados. Esto lo hizo menos predecible y más práctico.

Boca hacía circular la pelota rápido desde la salida, y los volantes tenían extremas libertades para recibir reposados entre líneas, especialmente Edwin Cardona tenía tiempo para pensar y ejecutar. Atlético Tucumán ajustaba tarde, llegaba a destiempo a las coberturas, y sufría mucho a espaldas del doble 5 compuesto por Franco Mussis y Abel Bustos.

La supremacía en el desarrollo, la visita logró imponerla rápidamente en el marcador, y antes que el reloj marque la media hora de juego, ya se encontraba ganando 2-0.

A los 11´ llegó el primero. Córner de Edwin Cardona desde la izquierda, y tras una carambola le quedó la pelota a Lisandro López, que con recursos de centro delantero, giró y de media vuelta definió abajo para vencer a Laucha Luchetti y abrir el marcador. Noveno gol de Licha en 70 partidos, gran promedio para un marcador central.

La ampliación de la ventaja se establecería con justeza segundos antes de que el minuto 30 empiece a correr. Cristián Pavón tiró una pared con el colombiano Cardona, llegó hasta el fondo con curriculum de 2017 y ensayó un excelente centro atrás donde Rodri Montes definió en carrera para marcar así su primer gol en primera y estampar el 2-0. Golazo. La combinación desactivó la defensa del local, la llegada hasta la línea final hizo que la atención se centre en la boca del arco y nadie tome al juvenil que ingresó como pancho por su casa a gatillar de primera.

Tras eso, con suma tranquilidad el cotejo no cambió de estilo ni de tónica e incluso el Xeneize tuvo en un mano a mano de Nicolás Orsini (de buen partido, con desgaste y sacrificio jugando de espaldas) la oportunidad de poner el tercero, pero la definición del ex Lanus quedó en el techo del arco. Por su parte, los dirigidos por Omar De Felippe habían perdido la brújula del partido y estaban desorbitados, marcando y cerrando mal en defensa, y sin precisión ni ideas a la hora de atacar.

Positivo primer tiempo de Boca en el José Fierro. Ganaba 2-0 con una imagen que dejaba demasiados puntos a destacar. Era vital la movilidad de los 3 volantes delante de Jorman Campuzano para recibir detrás del doble 5 del Decano. Mezcló bien en zona de resolución y ocupó inteligentemente los espacios.

Los primeros 10´ del complemento seguían la misma partitura que la etapa inicial, se olía tercer gol y no estaba en los papeles un posible descuento. Pero, este magnífico deporte, sacó su manual, y leyó el artículo número 1, el cual reza «el fútbol es el arte de lo imprevisto».

Boca perdonó en un ataque donde Frank Fabra llegó al fondo y no pudo encontrar sociedad por dentro para empujar a arco vacío, y en la réplica de esa jugada un centro de Junior Benítez encontró la testa de Guillermo Acosta, quien la bajo hacia el centro y la pelota fue llevada por delante por Lisandro López, que no pudo esquivarla y la metió en su propio arco. De la nada, el absoluto control que ejercía el club de La Ribera en el encuentro peligraba, en un gol azaroso que ponía al Decano a tiro de la paridad.

Atlético adquirió ánimo tras el inesperado descuento e hizo mermar el claro dominio Boca. Sin ideas claras, apostó a llenar de envíos aéreos el área de Rossi, la cual llenó de altura. De todos modos, no generó peligro por esa vía, fue demasiado inocuo, y solo completó 4 de 21 centros intentados (19%). No tuvo ninguna oportunidad neta el dueño de casa de igualar, pero, le quitó la posesión a su rival y lo incomodó. Es más, la más nítida fue para el Xeneize, que en los pies de Cristian Pavón y del chico Molinas, tuvieron 2 oportunidades inmejorables de entonar el grito sagrado, pero la flexibilidad del interminable Laucha Luchetti lo impidió.

Ingresó Aaron Molinas para tratar de tenerla más, y en sus botines se terminó el partido. El 16 la pisó en el córner, propicio la expulsión de Franco Mussis, que lo atendió sin anestesia, y le bajó el telón a un triunfo demasiado importante.

Boca sumó su tercer triunfo al hilo de visitante, sigue invicto desde que asumió Sebastián Battaglia y no se baja de la pelea. Se deposita a 2 de la zona de Libertadores y ya focaliza el flash hacia el encuentro del miércoles, donde a partir de las 21.30hs, enfrentará a Patronato de Paraná. En cuanto al torneo local, se le viene una seguidilla ante aspirantes al título, Colón, River y Lanus.