Sabor a poco

Tras la sufrida clasificación a cuartos de Libertadores por penales ante Inter de Porto Alegre, Boca debutó en la Zona Campeonato ante Arsenal, en la mismísima Bombonera.

Debido a la seguidilla de encuentros en este último corto plazo, y ya planificando el encuentro del miércoles ante Racing por Copa, Miguel Ángel Russo prefirió reservar la totalidad de los titulares (a excepción de Buffarini) y paró en cancha un equipo alternativo. Rossi; Buffarini, Zambrano, Ávila, Más; Zeballos, González, Jara, Obando; Maroni y Soldano, fueron quienes salieron desde el inicio.

La performance no fue la ideal, ni estuvo cerca de serlo para el local, quien disputó un aceptable primer tiempo poniendosé en ventaja a los 29´por intermedio del «Pulpo» González, pero padeciendo la etapa complementaria, siendo superado por Arsenal, que perdonó en más de una oportunidad y en el último minuto encontró la paridad en el botín derecho de Facundo Pons.

Lógicamente, debido a la escasa cantidad de partidos juntos, era de esperar no ver el mejor desarrollo colectivo en Boca, ante un conjunto del «Huevo» Rondina que es un elenco trabajado y con rodaje, que además, tiene el gran mérito de mantener la competencia y la idea a pesar de las constantes desmantelaciones que sufre mercado a mercado.

La primera etapa fue pareja, el Xeneize salía limpio desde el fondo y profundizaba por las bandas a través del debutante Ezequiel Zeballos, quien tuvo un buen partido, siendo incisivo y punzante, más de una vez llegó al fondo a pura habilidad, interesante aparición la del «Changuito». Con el correr de los minutos fue tomando contacto con la pelota Gonzalo Maroni, y ahí se vio lo mejor del Xeneize en la noche.

A los 29´llegó la apertura del marcador, tiro libre para Boca que ejecutó Agustín Obando, la pelota atravesó la barrera y le quedó a Diego González, que sacó de primera el remate para poner el 1-0. Primer gol con la camiseta azul y oro para el «Pulpo», su emoción se notó a flor de piel con un sentido llanto.

Arsenal no era dominado a pesar de estar perdiendo, y encontraba por la izquierda la manera de lastimar a través de Nicolás Castro, quien fue la figura del encuentro y doblegó durante toda la tarde-noche a Julio Buffarini. Por ese lado llegó la mas clara en el 1T para el elenco de Sarandí, el 11 eludió a Buffa y asistió a Lucas Albertengo, que disparó mordido y obligó la estirada de Agustín Rossi.

Ya en el segundo tiempo la balanza dejó de estar equitativa y se volcó para el lado del visitante, que a través de Emiliano Méndez -volante central- comenzó a manejar los hilos del partido, el 5 controlaba los tiempos y al no tener marca ejecutaba precisos cambios de frente que le daban sentido a los ataques del «Arse».

La izquierda del ataque seguía siendo la vía para lastimar del conjunto del Viaducto, a los 11´Alejo Antilef eludió por dicho sector a dos hombres y cedió atrás para Jhonatan Candia, el uruguayo definió mal. Avisaba la visita.

Eduardo Salvio, Nicolás Capaldo, Edwin Cardona, Carlos Tévez, todos a la cancha, Boca quería cerrar el partido, era consciente que estaba siendo superado.

Lo que se presentía y el desarrollo vaticinaba, ocurrió. 45´marcaba el reloj cuando Jesús Soraire envió el centro para Lucas Albertengo, que la bajó al medio y encontró al recientemente ingresado Facundo Pons, quien sutilmente la tocó por encima de Rossi para decretar la paridad.

Fue final 1-1. Boca tendrá que pasar rápido de página en este certamen que es demasiado corto y con escaso margen de error. La próxima jornada visitará a Independiente en Avellaneda. Pero su periplo por dicha ciudad arrancará el miércoles, donde visitará a Racing Club por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores de América.