El lateral colombiano, Andrés Felipe Román, sufre una miocardiopatía hipertrófica que podría dejarlo fuera de las canchas para siempre

A horas de la presentación del nuevo refuerzo, Boca emitió un contundente comunicado en el que aclaró que el jugador proveniente de Millonarios «no superó los estándares médicos requeridos por el Departamento Médico de Boca, requisito indispensable para la realización de la transferencia».

Lamentablemente, la afección que sufre Román es de alto riesgo y podría terminar con su carrera futbolística: la miocardiopatía hipertrófica, que se caracteriza por el engrosamiento del miocardio y alteración de la frecuencia cardíaca, es una de las principales causas de muerte súbita.

Tras recibir el parte médico el futbolista colombiano se encerró a llorar en una de las oficinas del club durante 2 horas y, más tarde, fue visitado por Miguel Ángel Russo quien le brindó palabras de aliento y contención.

De no haber sido por la revisación médica, es probable que Román pudiera fallecer en el campo de juego. La miocardiopatía hipertrófica se detecta a través de análisis de rutina como un electrocardiograma o una simple auscultación. Allí queda el interrogante: ¿Por qué ni Millonarios ni la Selección Colombiana pudieron darse cuenta de esto?