El diez tuvo su despedida como jugador un 10 de noviembre de 2001 en el estadio Alberto J. Armando. Fue una tarde que hizo emocionar a todos los hinchas del fútbol. La despedida se jugó cuatro años después de su último partido oficial. Fue un Superclásico por el Apertura 97. En dicha celebración, Diego Maradona jugó para la Argentina que era dirigida por Marcelo Bielsa y enfrentó a Resto del Mundo: un combinado con estrellas extranjeras como Francescoli, Valderrama, Matthäus, Cantona, entre otros.

Luego del partido que terminó 6 – 3 para la Albiceleste, Maradona plasmó frases que quedaron inmortalizadas para siempre en el mundo del fútbol: «El fútbol es el deporte más lindo y más sano del mundo. Yo me equivoqué y pagué, pero la pelota no se mancha», se convirtió en la más icónica.

En una Bombonera colmada hinchas qué iban a ver el último partido de uno de los mejores jugadores del mundo, también había muchas estrellas y celebridades que se despedían en cancha de Pelusa.